En 1955 Chrysler comenzaba la serie 300 que eran vehículos de lujo de gran tamaño (en torno de 5.5m de longitud) con un motor a partir de 300 cv y en configuración de 2 puertas, inicialmente con techo duro (hardtop) y a partir de 1957 también descapotable (convertible).
La primera serie se denominó C-300 (C de Chrysler), en lugar de 300 A; luego vendría la 300 B en 1956, 300 C en 1957, etc; hasta la 300 L de 1965, con diferentes re-stylings en algunos momentos.
La serie E se encuentra dentro del re-styling de la serie C, por lo tanto, los modelos de las series C, D y E son idénticos en el exterior, y son los primeros en los que se ofrece la opción descapotable.
A lo largo de los años además se hicieron cambios en el motor y en otros elementos.
En concreto, los modelos de la serie E estaban dotados de un motor cd 6.771 cc con una potencia de 380 Cv, que permitían a este vehículo de 2.080 kg alcanzar una velocidad máxima de 206 km/h, eso sí, con unos consumos que a día de hoy parecen absolutamente inimaginables: 28.8 l/100km. Se trataba de vehículos para un público muy exclusivo (entre las opciones estaban el aire acondicionado, elevalunas eléctricos, asientos ajustables eléctricamente, etc) lo que explica sus reducidas cifras de ventas:
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Techo duro |
Descapotables |
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300 C (1957) |
1767 |
484 |
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300 D (1958) |
618 |
191 |
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300 E (1959) |
522 |
125 |
En el cuadro podemos observar claramente el continuo descenso en las ventas, lo que propició que en 1960, en la serie F, además de cambios técnicos, se acometiera otro re-styling, que lograría remontar las ventas: 969 coupes de techo duro y 248 descapotables.
El modelo que nos presenta Brooklin en primer lugar nos llama la atención por su elevado peso, nada habitual entre los fabricantes de Die Cast, pero que tanto gusta a ciertos coleccionistas. La carrocería está pintada en un suave y homogéneo color dorado, destacando la parrilla frontal plateada con fondo rojo fiel al modelo original, y los neumáticos con el lateral pintado en blanco muy al gusto de esa época.
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